martes, 30 de septiembre de 2014

CAPÍTULO 47: AULILÍ

Le observo atenta. Está preparando todo lo necesario para la barbacoa, escoltado por Melen, Alejando, Pablo y Antonio (Orozco). Por un momento me planteo si me merezco que un hombre así se fije en mí y me trate de esa manera. Guapo, inteligente, amable, sencillo pero elegante, humilde, cariñoso… es tan… Y les cae bien, se nota. En especial creo que le ha caído muy bien a Alejandro, a él especialmente se le nota cuando alguien le da mala espina, tiene un sexto sentido para eso. Imagino que tendrá que ver la sensibilidad que tiene en general para detectar esas cosas. Le veo ahí, plantado, en bañador, haciendo la barbacoa y hablando con mis amigos como si tal cosa, con su copa en la mano o fumando. Es tan jodidamente normal que me vuelve loca. Me he sentido tan mal cuando me he dado cuenta de que estaba incómodo… pobrecito… estaba abrumado supongo.

-Lo vas a gastar de tanto mirarle – suelta Vero de repente – La baba hija…

-Qué imbécil eres… - digo bajando la cabeza avergonzada –

-Es muy mono… - dice Raquel mirándome con ternura –

-Mono? – dice escandalizada Vero – está para hacerle 7 hijos…

Estallo en una carcajada… mis pensamientos eran correctos, cómo conozco a Vero.

-Encima es simpático, no es un chulo… - prosigue Vero – me sigue las bromas, cosa muy importante… - me da por reirme - y ya he visto como te mira – arqueo las cejas – qué? Yo me fijo en esas cosas, ya lo sabes.

-Es un cielo… - digo tímidamente –

-Uy… esa actitud creo que no te la he visto nunca eh? – Pastora se ríe – así, tan tranquila, tan cómoda…

-Nada, no lo sueltes o nos enfadaremos contigo – sentencia Vero –

-La verdad es que creo que no había estado tan agusto con alguien en tan poco tiempo… - me da una risilla nerviosa – me siento rara.

-Se ha integrado muy bien… - Raquel bebe de su cerveza – y no es fácil, te lo digo yo.

-Mira, lo único que puede fallar es que se tuerza… - contesta Vero – que se flipe y te haga daño, entonces le mataremos – sonríe ampliamente – mientras tanto, a mí me gusta para ti.

-Aleluya – alzo las manos al cielo –

-Es que hija mía… nos has presentado a cada uno que vaya tela… - arqueo las cejas de nuevo – es verdad, te buscas ruinas… ahora has encontrado una mina parece ser…

-Y médico nada menos, yo estoy muy tranquila si hay un médico por aquí – dice Pastora riéndose –

-De qué os reís? – Vanesa se acerca –

-Del consorte de Malú – suelta Vero –

-Estás tonta eh? – le doy un manotazo –

-Jajajaja! – ríe Vane – lo tienes ahí trabajando como un negro… qué poca vergüenza…

-Y qué hago si se ofrece? – sonrío mirándole –

-Yo creo que te tiene un poco de miedo… cosa normal por otra parte… - espeta de forma graciosa Vane – he estado haciendo un sondeo sutil…

-Ya la estás liando… - niego con la cabeza –

-Lo consideran un buen fichaje todos… así que nada…

-Seguiremos informando… - interviene Vero –

-Joder, qué calor… - Melen se acerca a nosotras – oye, tu chico controla eh? Ha hecho ahí una salsita para echársela a la carne por encima y huele que te mueres…

-Ves? Buen fichaje… - dice Vero riéndose –

La barbacoa resulta todo un éxito, yo no me explico como las cosas pueden salirle tan bien a este hombre. Todo lo que hace le sale bien, tiene que tener algún defecto, yo no se lo encuentro, pero debe tenerlo… sino me asustaré, porque yo tengo miles. La carne está riquísima, menos mal que he comprado para un regimiento, porque todos están repitiendo.

-No te cansas? – digo de manera cariñosa a Quique –

-De qué? – me mira mordiendo una chuleta, está muy gracioso así – tenía mucha hambre…

-No, de eso no… - digo sonriendo – de hacerlo todo bien…

-Ah… todo? – asiento sonriente – no… no me canso… - dice con cierto aire chulesco – está rica no?

-Está todo riquísimo… - le miro un tanto embelesada –

-Voy a explotar… - sentencia Pablo –

-Bueno, el doctor ahora repartirá una ronda de Almax para bajar esto… - dice de manera divertida Vero y hace reir a toda la mesa –

-Esto se baja con música… - le doy voz al equipo –

-Metallica? – dice asombrado mirándome – tú? Metallica?

-Qué pasa? – contesto como ofendida –

-Nada nada… - alza las manos – que me sorprendes todos los días... y me mola esta música - dice sonriente - 

Yo sigo embobada mirándole. Charla tranquilamente con mi hermano y Rubén, creo que estoy llegando al culmen de la felicidad. Me encanta verle así, no le había visto desenvolverse en un ambiente tan distendido. La lista de reproducción que me pongo en casa siempre, sigue sonando. De pronto, un tema hace acto de presencia. Quique me mira con los ojos abiertos, como sorprendido, y se acerca a mí.

-Jefa, tú que quieres, que te pida matrimonio? – dice pegado a mi oído y me hace sufrir un escalofrío – es una de mis canciones favoritas…

-Ah si? – digo sonriente –

-Mmm… - hunde su cara en mi cuello – no me dejes beber más, que me pongo excesivamente cariñoso…

-Jajajajaja! Más?

-Más… tú no sabes hasta donde puede llegar mi estupidez…

Se abraza a mí y comienza a cantar pegado a mi oído. Joder, no sabía que cantaba tan bien. Es tan mono, parece que va algo contentillo… observo como Vero nos mira con una ceja levantada y, rápidamente, se pone a cuchichear con las chicas. Comienzo a cantar con él, ya se va animando. Si tuviera la visión que tengo yo… todos nos miran de reojo. Menos mal que él está de espaldas, sino creo que habría salido corriendo. Al terminar la canción, me planta un beso de estos que te dejan en shock.

-Guapa… - me susurra a escasos centímetros de mi boca – me puedo dar la vuelta sin ponerme rojo como un tomate?

-Jajajajajaja! – río con ganas – nos estaban mirando antes…

-Lo he supuesto… ves? No me dejes beber más, que hago tonterías…

-Pues a mí me parece que estás muy gracioso… - le hago una carantoña –

-Eh Quique! – se oye la voz de mi hermano – vente pa ca, que nos vamos a echar una foto

-Y yo qué? – pregunto indignada mientras caminamos hacia ellos –

-Yo creo que cabemos todos en la foto… hay que situarse estratégicamente… Vane, cógeme en brazos – bromea Melendi –

-Claro… - Vane pone los ojos en blanco –

-Quién tiene el brazo más largo? – pregunta inocentemente Pastora, pero no puedo evitar reirme –

-El brazo no sé… pero la mano seguro que Quique – suelto sin pensar, creo que también he bebido algo de más –

Una risa general se instaura en mi jardín. Quique me mira con gesto divertido. Parece que le ha hecho gracia mi comentario. Me toca el trasero fugazmente y hace que de un respingo y me parta de la risa.

-Dios… es que no sabemos hacer una foto? – coge la cámara Melendi – venga, caras normales o raras?

-Yo rara, no puedo poner otra – suelta Quique y se escucha una risa general –

Nos encontramos todos apegotonados en una parte del jardín, intentando salir en ese selfie estilo los oscar. Me parece una situación divertida, sobre todo al ver que a algunos les ha dado un ataque de risa y no pueden parar de reir. Mi hermano y la banda están subidos a unas sillas, detrás de todos. Como la foto salga bien, la enmarco.

-Venga Melen, que me meo viva joder! – suelta Vane –

-Que no puedo apretar al botón cojones… - dice Melendi entre risas – ahora ahora… cara raraaaaa!

Me caen lagrimones al ver la foto. Vaya caras hemos puesto. Casi sin pensarlo, Melen la ha subido a twitter con su móvil. Estupendo, sale Quique, pero me la suda tanto. Es más, que se entere todo el mundo que estoy con este hombre joder! Tengo que decirle a Vero que me guarde el móvil, puedo comenzar a hacer burradas en este momento. Como empezar a escribir por ejemplo. Y no, serénate Malú, pero es que no puedo, es que le veo reirse y me contagia la alegría. Es eso, es alegría.

 En la lista de reproducción que suena de fondo, aparece una canción mía. Soy un poco egocéntrica parece ser. Quique me mira sonriente y se pone a bailar de forma graciosa acercándose a mí.

-Aulilí li lila… - tararea mientras se acerca –

-Jajajajaja – no puedo parar de reir –

-Mira qué chula, prepara la música para su fiesta y mete una canción suya ahí, como si nadie fuese a darse cuenta…

Me levanto todavía riéndome ante los gestos de Quique para que baile con él. La gente está a su bola menos el grupillo que estábamos hablando, que estoy segura que nos miran. Nos ponemos a bailar medio en broma, medio en serio. Bueno, Quique lo hace de broma, aunque se mueve bien, con ritmo. Pone una mano en su boca y la mueve mientras da vueltas y yo no puedo parar de reirme. La canción acaba y me abrazo muerta de risa a él.

-Cómo cansa esto de bailar cuando no sabes hacerlo – dice divertido sentándose en el césped –

-Sí que sabes… - digo sentándome a su lado – pero te gusta hacer el tonto…

-Madre mía… - escucho por lo bajini a Vero negando con la cabeza –

-Bueno, punto y final a la cerveza – dice convencido – suficiente…

-Pero hombre! Si estamos de fiesta! No pasa nada por beber un poquito! – dice divertida Pastora –

-No no, que si empiezo a hacer tonterías la jefa me echa – alza su dedo hacia mí –

-Jajajaja! Pero como te voy a echar? – digo muerta de la risa –

-Es que como siga bebiendo veo las portadas mañana – carraspea poniendo voz seria – Joven asistente a una fiesta de Malú, encontrado agarrado a una farola – todas estallan en una carcajada – el joven fue trasladado a urgencias mientras susurraba Aulilí li lila…

-Para… - digo muerta de risa –

-La verdad es que nos estamos entonando un poco eh? – dice Vero mirando a Quique – tu eres de beber mucho?

-Vero! – le doy otro codazo, el enésimo de la velada –

-Yo? – ríe – que va, mi cervecita y mi tapita, pero borracheras las justas… ya pasó mi época…

-Ya pasó la época dice… - contesto rápidamente – ni los 30 tiene y ya dice que le pasó la época…

-Me han quitado 7 años de vida los críos… - reímos ante su comentario – tengo las coronarias ahí, luchando por no taponarse…

-Jajajaja! – río con ganas – qué exagerado eres…

No hay comentarios:

Publicar un comentario