CAPÍTULO 173: AL ALBA

Los rayos de luz atraviesan las rendijas de la persiana. No tengo ni idea de qué hora es, pero tiene pinta de ser mediodía. Menuda noche la de ayer, me pasé mucho bebiendo. Me llevo la mano a la cabeza al notar unos latidos dentro, incesantes. Resaca, sin duda. Malú no está en la habitación, imagino que habrá pensado que había muerto y estará llamando por teléfono a una ambulancia… porque tengo que tener una pinta horrible. Me levanto de la cama y, con cada movimiento, la cabeza parece que me va a estallar. Repaso en mi mente lo que pasó anoche mientras camino por el pasillo. 

No escucho voces, qué raro… igual se han ido todos y es ya lunes en vez de sábado. Anoche mi método no funcionó, pero estaba yo como para pensar en parar antes de correrme… madre mía… tengo lagunas mentales, algo que no me pasaba desde hace bastante tiempo.

Cuando abro la puerta de la calle, la luz parece derretirme las retinas. Me siento como Edward Cullen cuando le da el sol pero, en mi caso, la piel no me brilla, sino que siento que me arden los ojos.

-Me cago en mi vida… - exclamo tapándome los ojos –

-Buenos días cuñado!!! – escucho gritar a Jose –

-Vuelve a gritar así y no ves a tu hermana casarse… - digo serio –

-Jajajaja! El novio resacoso… algo normal por otra parte… - no sé desde donde me habla porque no soy capaz de abrir los ojos –

-Y que me vaya a casar con este despojo humano… mira qué pintas - Noto la voz de Malú acercarse – qué? La juventud se te escapa de las manos eh? – noto como me da un beso en la mejilla –

-La vida es lo que se me escapa… - sigo sin abrir los ojos – en qué año estamos? – pregunto de broma –

-Exagerado… - escucho como se ríe – estás resacoso eh?

-Esto no es resaca… - camino abriendo los ojos lentamente y veo a casi todos en la piscina, mirándome mientras se ríen – esto es la antesala de la muerte…

-Tío… con la de fiestas que nos hemos pegao tu y yo cojones! – Escucho gritar a Alex y noto una palmadita en el hombro que parece recolocarme todos los órganos –

-Vuelve a pegarme así y te ahogas en la piscina Alexandra…

-Jajajajajaja! – estalla en una carcajada – se acuerda, no hay peligro entonces…

-Dejadme una hamaca o me tumbo en el suelo… - noto como mis piernas van a dejar de hacerme caso de un momento a otro –

-Anda compadre, siéntate aquí… - abro los ojos y veo a Alejandro cederme su hamaca –

-Eres un amigo… - me dejo caer en la hamaca – buenos días a todos por cierto…

-Pero abre los ojos hombre!! Que hace un día precioso! – exclama Vane –

-Si abro los ojos me quedo ciego… - pongo mi brazo tapándome los ojos -  

-Buenos días dice… las 4 de la tarde y buenos días… - escucho la voz de Melendi -

-Las 4 de la tarde? – exclamo – pero por qué? Por qué este ritmo de vida tan sano? – digo irónico – Malú! – grito abriendo los ojos pero no la veo –

-Ya voy… - contesta a lo lejos – no puedes vivir sin mí eh? – sonrío sin querer – toma anda…

Abro los ojos y veo un vaso de agua y una pastilla. Adoro a mi futura mujer.

-Qué haría yo sin ti? – me incorporo haciendo un esfuerzo sobrehumano y le doy un beso en los labios –

-Ale, descansa en la hamaca mientras me doy un baño… - la veo alejarse, lleva el bikini puesto – cuando nos casemos, estas resacas no eh? Que he entrado en la habitación hace un rato y me he puesto tensa… casi ni respirabas…

-Exagerada… - sonrío de medio lado – dios… qué dolor… - me toco de nuevo la cabeza al notar ese latido de nuevo –

-No sabes beber coño… - Marta se sienta a mi lado – y encima anoche en vez de dormir la mona, os ponéis a jugar al teto…

Abro los ojos de par en par y busco instintivamente con la mirada a Malú. En un gesto muy gracioso, me saca su dedo corazón y hunde su cabeza en la piscina.

-Al teto dice… - digo intentando mentir –

-Yo temí por los cimientos y tal… - dice Vero –

-Tú cállate que fue terminar estos dos y empezar vosotros… - dice Melendi – que me tuve que salir aquí fuera con Jose para no pegarme un tiro…

-La mejor decisión fue la mía sin duda… - dice Jose sentándose al borde de la piscina – no me hace ninguna ilusión escuchar a mi hermana jugando al teto…

Pero qué pasa? Hasta mi cuñado habla de esto como algo normal…. Que me follé anoche a su hermana coño! Bueno… llevo un año haciendo lo mismo… pero no me hace ninguna gracia que nos escuchasen anoche, aunque parece que a Malú se la suda mucho a juzgar por sus risas.

-Yo como dormí arriba… - aparece mi hermana saliendo de la piscina – tampoco me hace ninguna ilusión escuchar a mi hermano… te comprendo Jose…

-Bueno ya no? – digo un poco indignado – qué pasa? Que no folláis vosotros o qué?

-Quique! – me recrimina Malú desde la piscina –

-Qué? Si están hablando ellos de eso! – respondo indignado – qué fácil es echarle la culpa al marido… - vuelvo a tumbarme en la hamaca – buah, no puedo con la luz del sol… - me tapo los ojos de nuevo –

-A partir de ahora vas a ser mi vampiro… - Malú se acerca a mí y me moja por completo al darme un abrazo –

-Malú! Que estás empapada! – me quejo –

-Mira, como anoche… - contesta Vero por lo bajini y una risa general me hace ponerme colorado –

La noche de antes de una boda siempre me ha resultado curiosa. Siempre había pensado como sería… cómo la pasarían los novios. Es rarísimo. La sensación que tengo al pensar que mañana voy a casarme es tan extraña… son nervios mezclados con ilusión y también con incredulidad. Vamos a pasar la noche separados, se han empeñado todos… a mí me parece absurdo, lo único que consigue esto es que esté todavía más nerviosa.

-A dormir tempranito… - aparece mi madre en el salón –

-Mamá, tú crees que yo puedo dormir a las 10 de la noche? – digo incrédula –

-Malú hija, que mañana te casas, tienes que estar descansada – se sienta a mi lado en el sofá –

-Ay mamá… - digo nerviosa – que mañana me caso…

Mi madre me mira con gesto tierno y me abraza. Me siento como cuando era pequeña y me acurrucaba en su regazo. Ahora hace lo mismo. Me acaricia el pelo suavemente.

-Cómo pueden cambiar tanto las cosas en tan poco tiempo mamá? – pregunto pensativa –

-Ay hija… - suspira – la vida es así… hay que disfrutar los momentos como éste…

-Pero la de cosas que me han pasado en un año… - resoplo – no es normal… es como… - me incorporo – una montaña rusa…

-De eso se trata hija…

-Si pienso en mañana me muero de los nervios… - comienzo a reirme de manera nerviosa –

-Qué contenta estoy… - dice de repente y me quedo mirándola – Quique es un chico estupendo…

-No sabes cuánto… - sonrío sin querer – mira… - saco mi móvil – mira lo que ha puesto…

Abro twitter y le enseño el tweet que ha puesto hace un rato. Una foto de los zapatos que creo que llevará mañana, seguida de una frase: “Mañana daré los pasos más importantes de mi vida a tu lado”. Me ha nombrado y se ha revolucionado todo. Es tan sensible y tan perfecto. Mi madre sonríe mirando el móvil.

-Si es que mi yerno… - dice algo emocionada – y tú no vas a poner nada?

-Ay mamá… no sé qué poner… - digo nerviosa – no valgo para estas cosas…

-Con lo sensible que tú eres… - niega con la cabeza – nunca te había visto tan feliz… - mi madre, experta en emocionarme – cuando seas madre, entenderás muchas cosas…

-Mamá… - tuerzo la cabeza sonriendo –

-Es verdad hija… una madre qué es lo que quiere? – suspira – pues que sus hijos sean felices y encuentren a alguien que les cuide como lo haría yo… y… - carraspea – esa persona es Quique, sin duda.

-Te gusta más a ti que a mí… - me río tímidamente –

-Pues puede ser… - dice de broma riéndose – venga, a dormir…

-No voy a poder… - digo desganada –

-Quique, deja el móvil que mañana tienes que madrugar… - mi madre entra en la habitación sin avisarme –

-No puedo dormir… - confieso mirando el móvil –

-Eso es porque la casa es extraña… pero si dejas el móvil seguro que es más probable que te duermas… - se sienta en la cama –

-Estoy repasando en mi cabeza lo que ha pasado este año… - sonrío – no es increíble?

-No… - dice convencida – es justo… - le miro extrañado – es justo que seas tan feliz…

Sonrío algo emocionado y devuelvo mi mirada al móvil.

-Te confieso que me ha costado acostumbrarme a que no vivas en casa… - me acaricia la cara tiernamente – pero sé que con Malú estás feliz…

-Ya lo creo… - sonrío – es guapa eh? – digo orgulloso –

-Y buena chica… - suspira – que al fin y al cabo… es lo que una madre quiere para su hijo…

-No te pongas transcendental anda… - digo avergonzado –

-Si no me pongo así el día antes de tu boda… - sonríe – cuándo sino? – sonrío – al principio me daba un poco de miedo… - frunzo el ceño – íbais un poco deprisa…

-Si… - río –

-Y ella tan conocida… - suspira – no sé… me daba un poco de miedo que te hiciera daño…

-Mamá… - suspiro – Malú es incapaz de hacerme daño…

-Eso lo descubrí después… - sonríe acariciándome de nuevo la cara – me gusta mucho mi nuera…

-Aleluya! – alzo los brazos al cielo – una suegra contenta con su nuera! – digo irónico – el mundo está cambiando…

-Hablo en serio… - suspira – aunque me cayó bien desde el principio… pero… - suspira de nuevo – es que eres mi niño…

-Y ahora ya no te da miedo? – digo divertido –

-No – sonríe – te quiere… eso una madre lo detecta y yo lo sé… - se acomoda en la cama – y sois muy parecidos… y te trata bien… - suspira – en fin, que no se me ocurre una chica mejor con la que te puedas casar…

-Esto se lo pienso decir mañana… que lo sepas… - digo riéndome –

-No te preocupes… se lo diré yo – sonríe – mañana voy a llorar mucho, así que luego no te quejes… será tu culpa…

Sonrío y devuelvo mi mirada al móvil. De los muchos tweets en los que me están nombrando, acaba de llegarme uno que me hace sonreir ampliamente. Sabía que Malú escribiría algo. Abro el tweet nervioso. Un nudo en la garganta llega para quedarse.

-Te escriben mucho o qué? – dice mi madre interesada –

-Es Malú… que la ha liado… - sonríe tiernamente – mira…

Le enseño el móvil. Veo como mi madre va sacando una sonrisa conforme va leyendo.

“Mañana me darás otro momento imborrable. Como todos los que me has dado desde que te conocí. Gracias por enseñarme lo que significa ser feliz” Junto al tweet, una foto de los dos, en aquel primer viaje, en el mirador. Aquella foto que, cuando nos la hicimos, dijo que si la subía, se liaba. Pues la ha subido. Me da por reirme. Si lo leo de nuevo, creo que voy a llorar. Sentimientos a flor de piel esta noche, me lo imaginaba. Mi madre me mira tiernamente y, sin decir nada, me da un abrazo.

-Lo dicho… - dice algo emocionada – me encanta mi nuera…

-Jajajajaja – me río –

-Deja el móvil de una vez y duerme vale? – me da un beso en la frente – hasta mañana cariño…

-Hasta mañana mamá…

No puedo evitar volver a mirar lo que ha escrito. Vuelvo a sonreir y a tener ganas de llorar. Mañana me voy a casar con la mujer más maravillosa del mundo.