Estoy casi más nervioso que ella. Noto como mis primos me observan…
este fin de semana voy a tener que acostumbrarme a que me hagan radiografías.
Sé que está nerviosa, pero lo disimula muy bien, quizá por esa faceta de actriz
tan suya, que siempre le digo que tiene, pero que siempre me la niega. La
comida llega a su fin. Tras despedirnos de mis primos y mis padres, recibo una
llamada de Alex y Marta. Están en la ciudad. Estupendo, otra presentación más
para mi pobre chica, que hoy se enfrenta ante uno de sus conciertos más
importantes, y yo no hago más que ponerle nerviosa. Malú tiene que ir al
ensayo, así que quedo con Alex y Marta en las inmediaciones del estadio. En
seguida viene un coche de su equipo a recogernos. Mientras llegamos, recibo una
llamada de Alex.
-Tio… eh… me puedes decir como quieres que te encontremos?
-Qué pasa?
-Tú sabes la gente que hay aquí fuera? Es una puta locura…
parece que hoy haya partido…
-Malú – tapo el auricular – Alex dice que están las
inmediaciones del estadio a rebosar de gente…
-Ya será menos… - contesta incrédula –
-Hemos habilitado una zona para que entremos con el coche sin
problema… pero vamos… hay unas colas increíbles… - interviene el conductor –
-Vale, escucha Alex, vete para la zona donde no haya gente…
-Vale… a mi casa entonces no?
-Jajajajaja! – estallo en una carcajada – idiota, hay una
zona de entrada al estadio que es solo para los VIP – me siento imbécil
diciendo eso – bueno, tu me entiendes…
-Oído… Marta, somos VIP, pon cara de famosa… - oigo como le
dice a su mujer – allí nos vemos colega.
-Este Alex es gilipollas… te va a encantar… - Malú me mira
sonriendo tiernamente – ha ido bien la comida no?
-Si… he pasado muchos nervios… pero si…
-Oye… no tienes por qué ponerte nerviosa… son mi familia, son
buena gente… - Malú asiente algo confundida – además, les he pagado una pasta
para que te traten bien…
-Calla… - ríe destensandose – pfff… esta noche voy a estar
como un flan…
-Que no, ya verás… si lo has hecho mil veces…
-Es mucha gente… hostia… - exclama mirando por la ventanilla –
-Esa es la cola – indica el conductor – y solo son las 4 de
la tarde…
Rodeamos el estadio y encaramos la entrada. Unas vallas
impiden que la gente tapone la entrada. Así que tenemos que entrar con todo eso
lleno de gente. Observo a mi alrededor, intentando ver a Alex y Marta, pero hay
mucha gente. Decido llamarles por teléfono.
-Tío eh… - se escucha mucha gente de fondo – ese coche es el
tuyo?
-Si, espera que me bajo – para el coche – ordeno al conductor
– te veo dentro jefa – dejo un beso en sus labios y me bajo de él – me ves?
Alzo la mano y cientos de personas me gritan. Dios mio, no
había previsto esto. Ahora sus fans, que me conocen, me hacen cientos de fotos.
Veo aparecer por un lateral a Alex, Marta y Rocío. Les indico a los de
seguridad que vienen conmigo y, tras saludarnos fugazmente, corremos al
interior del estadio. No sé por qué, he alzado la mano, como saludando a la
gente, como si fuera famoso, soy un estúpido.
-Joder Quique, menuda entrada triunfal… - exclama Alex –
-Qué locura… - Marta me da dos besos riéndose –
-Hola tito – exclama Rocío una vez hemos entrado al estadio –
-Hola princesa! – la cojo en brazos – cómo está mi pequeña?
-Amos a ver a Malú – dice inocentemente –
-Sí? Anda, que guay no? – miro de manera cómplice hacia Marta
mientras andamos –
-Si, mami me ha dicho que es tu novia
-Jajajaja – me encanta esta niña – si… la quieres conocer? –
asiente ilusionada – pues ahora te la presento, no te preocupes…
Entramos dentro del campo, al fondo, se ve el coche que ha
llevado a Malú hasta dentro y mucha gente del equipo, a los que saludo. El
escenario es enorme, flipante, con un par de pasillos a los lados, bastante más
largos que a los que Malú está acostumbrada me parece. Veo como alza la mano,
saludándome. Miro a Rocío de reojo, que me mira entusiasmada.
-Os ha costado entrar? – pregunta sonriente Malú – hola, tú
debes ser Alex
-Si, encantado – se dan dos besos –
-Yo soy Marta – hacen lo propio – gracias por invitarnos… -
Malú niega con la cabeza sonriente -
-Y esta pequeñaja tan guapa quién es? – pregunta Malú
haciéndole una carantoña – Rocío a que si? – se agacha hasta ponerse a su
altura. La niña asiente ilusionada –
-Es Malú cariño, dale dos besos, venga! – le anima Marta –
Rocío es un torbellino, espontánea, alegre, tanto que, al
escuchar esas palabras de su madre, se lanza a los brazos de Malú haciendo que
ponga cara de sorprendido. Malú ríe a carcajadas.
-Vaya… esto se va a llenar de gente? – exclama sorprendido
Alex –
-Y tanto… - afirmo –
-Vamos para dentro, tengo que ensayar un rato, queréis verlo?
– propone Malú –
Mis amigos asienten con cara de ilusionados. Hay que ver, qué
cómoda parece que se siente con ellos y qué nerviosa estaba con mi familia. Nos
adentramos en los entresijos del equipo hasta el backstage y subimos hasta el
escenario.
-Bueno, tengo que dejaros un segundo, podéis pedir lo que
queráis
-Gracias – contesta sonriente Marta – qué simpática es no? –
me dice en voz baja –
-Mucho, qué te crees? – contesto orgulloso – Rocío no para de
mirarla…
-Menudo viaje nos ha dado… - Alex niega con la cabeza – todo el
rato Malú, Malú, Malú…
Malú comienza a ensayar bajo la atenta mirada de mis amigos.
De vez en cuando nos mira y sonríe algo avergonzada, no puede evitarlo, es
tímida aunque quiera disimularlo.
-Joder… todo esto lleno va a ser una pasada chaval… - noto
emoción en la voz de Alex -
-Está nerviosa… - sonrío –
-Normal… estoy nervioso hasta yo… - dice Alex –
Malú termina de ensayar, no le gusta hacerlo demasiado, no
quiere que se le canse la voz, solo lo hace para comprobar que todo está bien,
una vez hecho, prefiere estar lejos del escenario.
-Eh doctor! – la voz de Vero me sorprende a mi espalda – la
baba…
-Por donde has entrado? No te he visto…
-Normal, esto es enorme… - dirige su mirada a mis amigos –
hola, soy Vero, la amiga de la artista…
Escucho a Alex y Marta reírse. Ya está, se van a llevar bien.
Rocío y Lucía se miran de manera tímida.
-Mira Lucía, una amiguita para jugar, qué te parece?
Lucía, tan tímida como siempre, no sabe qué decir. Sin
embargo, Rocío, bastante más extrovertida, le propone jugar.
-No os vayáis lejos! – grito Vero – nena! – entra al
escenario como si nada, haciéndole aspavientos a Malú –
-Es normal eh? Está un poco loca, pero es normal… - les digo
a mis amigos –
-Qué fuerte… estoy en el escenario de un concierto de Malú…
agárrame Alex, que me desmayo… - finge Marta –
-Esta noche van a venir casi todos, algunos tenían guardia,
ya sabes…
-Bueno, seguro que lo pasamos bien – parte de mis amigos van
a estar también allí –
-Lucía! Ven a saludar a tu tía! – la voz de Vero es de todo
menos grave –
Lucía va corriendo hacia el escenario y Rocío nos mira, como
pidiéndonos permiso.
-Quieres ir tú también cariño? – digo cogiéndola en brazos –
pues venga…
-Anda Lucía, si te has echado una amiguita eh? Chicos, venga,
que voy a cantar con ellas, tocad algo – ordena a su banda –
Observo la escena al lado de Vero, Alex y Marta. Malú está
cantando con Rocío, que está que se muere de felicidad, y Lucía, que parece
perder la vergüenza con un micro en la mano. Qué estampa tan conmovedora. La
verdad es que se le dan bien los niños, la adoran, sería una buena madre. Agito
la cabeza sonriente por ese pensamiento.
Poco a poco se va llenando el estadio. Estoy cada vez más
nervioso. Las puertas se han abierto y se han agolpado miles de personas para
entrar. Alucinante.
-Asómate anda… - casi la obligo –
-Que no! Que me pongo más nerviosa!...
-Pues mi familia ya está en la grada… eso te tranquiliza? –
digo riéndome –
-Te mato… - me da una palmetada – esto es una locura, voy a
matar a Rosa por tener estas ideas…
-Rosa tiene visión empresarial… sabía que esto se llenaría,
igual que se llenará el Vicente Calderón…
-Cállate! – me ordena –
El concierto está a punto de empezar. Me despido de ella como
siempre, con un beso y un “mucha mierda”. Me dirijo a nuestro sitio VIP
reservado. Mi familia ya está allí. Nos saludamos efusivamente. Poco después,
se apagan las luces. El concierto está a punto de empezar y mi corazón, como
siempre, va a mil.
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